He decidido pasarme las tardes en casa, al menos por un tiempo. Me paso el día viendo mi perrito correr como un pequeño ratoncito inocente que salta y ríe y llora y duerme la siesta respirando muy profundo y haciendo ruiditos en sus sueños. Y a veces cuando se cansa, se tira en su cama y junta las patitas como rezando, como rogándole a algún Dios que nos deje ser un poco como él. Y será porque ya lo necesito, porque ya es parte de mis días y noches y pesadillas de perro que comparte a veces conmigo, y yo le pido que me haga reír, y que sea bueno. Porque, no importa realmente que hagas, uno nunca termina de ser completamente bueno, solo cuando muere, pero yo no quiero morir y perderme todo esto. Perderme los otoños y bostezos, y la melancolía que me salva de la vida. Y tampoco la tristeza de hoy, y tal vez de mañana y la semana que viene, porque me deprimo y quiero ver a mi padre, pero solo puedo en sueños, y nunca alcanza. Y cuando despierto me invade un terror espeso y a veces no puedo ver si mi amigo esta en su cama o ya se fue, y maldición, me pierdo el desayuno y el día y lo extraño tanto que me vuelvo a dormir y también rezo, para encontrarlo en otro sueño, en uno más y contarle lo que me pasó ayer, o la semana pasada o contarle algo, lo que sea que pueda escuchar.
Hoy no es Abril, pero se parece, porque hay en el ambiente un olor reciclado de hojas y viento que hacen una música de otoño que suena mucho mejor que una canción de Aristiñoño. Y yo trato de cuidar a alguien porque ya no quiero cuidarme y tampoco tengo ganas. Y si los envío al demonio? y si te envío al demonio? y si te maldigo y te cuento que no me importan las propagandas ni la política ni los trajes caros, ni la tv, ni Cesar Scollo, ni la gente de mi pueblo. Y si me olvido de todos y me quedo con mi perro? y si te pido que me acompañes?
Uno no llega nunca a vaciarse por completo, siempre queda demasiado en el fondo como para empezar de nuevo. Y no lo admites pero no podrías vivir sin ello.
a mi tampoco me importan las propagandas, la politica, los trajes caros, la tv, ni muchas cosas mas que serian parte de una lista infinita denominada "Vida".
ResponderEliminaryo te acompañaria, pero no se cuanto tiempo mas seguire aqui. no me consuelan los otoños ni los bostezos ni la melancolia, no me alcanzan...
quiero ser completamente bueno, y como vos dijiste, solo hay una forma.
(...)porque me deprimo y quiero ver a mi padre, pero solo puedo en sueños, y nunca alcanza.
ResponderEliminarAntes de llegar a tu página, estaba sentadita en mi silla hecha un bollito, mirando el cielo por la ventana. y pensando exactamente lo que dijeron tus palabras.
un beso!
los sueños son una porquería. nunca alcanzan para nada.
ResponderEliminarsos tanto, tanto, vos...
ResponderEliminarquien? vos?
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